La señora Matthau dijo: “¿Te acuerdas de esa historia de Salinger?”
- “¿Salinger?”
- Un día perfecto para el pez plátano. Ese Salinger”
- “Franny y Zooey”
- Umh-huh. ¿No te acuerdas de él?
La señora Cooper lo pensó, frunció el labio: no, no lo recordaba.
- “Fue antes de que estuviéramos en Brearley”, dijo la señora Matthau. "Antes de que Oona conociera a Orson. Ella tenía un novio misterioso, este joven judío con madre en Park Avenue, Jerry Salinger. Quería ser escritor, y le escribió a Oona cartas larguísimas de diez páginas mientras estuvo en el ejército. El tipo de cartas de amor-ensayo, muy tiernas, tiernísimas, más que si las hubiera escrito Dios. Lo que es ya tal vez demasiada ternura. Oona solía leérmelas, y me preguntaba qué pensaba, yo le decía que me parecía que debía ser un chico que lloraba con mucha facilidad; pero lo que ella quería saber era si era alguien brillante, con talento, o sólo un estúpido, y yo le dije que las dos cosas, que era ambas cosas, y años más tarde cuando leí El guardián entre el centeno y me di cuenta de que el autor era el Jerry de Oona, me mantuve en esa misma opinión.”
“Nunca oí ninguna historia extraña sobre Salinger”, confió la Señora Cooper.
”Yo nunca oí ninguna sobre él que no fuera extraña. Ciertamente no era el típico chico judío de Park Avenue.”
Extraído de Plegarias Atendidas de Truman Capote. La penosa traducción, mía.
AÑADIDO I: YA ES LEGAL
- L. Grobel: ¿Cuántos escritores incrementarían su fama si se murieran mañana de repente?
- T. Capote: Prácticamente todos.
- L. Grobel: ¿Quiere decir que el mejor no ha aparecido todavía?
- T. Capote: Bueno, eso ayudaría a J. D Salinger.
- L. Grobel: Creí que había muerto, en sentido figurado, hace muchos años.
- T. Capote: Sí, bueno, pues podría legalizarlo.
Extraído de Conversaciones íntimas con Truman Capote de Lawrence Grobel. Traducción de Benito Gómez Ibáñez.
AÑADIDO II: Alguien se ha quejado alguna vez de que en las fotos que de vez en cuando cuelgo y a pesar de sus pies, a veces no reconoce a los retratados. Para evitar que eso ocurra con este post, precisaré quiénes son los citados, según la fuente en inglés de donde he extraído el texto.
La señora Matthau, Carol Marcus. Actriz y esposa de Walter Matthau, de ahí el apellido.
La señora Cooper, Gloria Vanderbilt. Casada con el señor Cooper, claro. Y que al parecer mantuvo durante muchos años una estrecha relación con Gordon Parks.
Oona. Oona O'Neill, más tarde Oona Chaplin. Hija del dramaturgo Eugene O' Neill y casada con el señor Chaplin.
Orson. Orson Welles. Su seguro servidor.
Capote y Salinger son escritores.
En la foto, Geraldine Chaplin con la que fue antigua compañera de estudios y amiga de su madre, la señora Matthau.
7 comentarios:
Hola, David:
El safari promete ser interesante.
Ahora, voy a ver si me encuentro con alguna felina, que sea de lo más Selina.
De momento, decirte que coincido con Bruce Tinn en lo de que no tiene sentido que un creador que no valora un medio, despliegue su arte en él.
Puestos a ser mercenarios, hagámoslo a cambio de cosquillas no de monedas.
A leerte voy.
Capote es otro de mis escritores favoritos. Con tanto talento y tan diverso. Lástima que se malograra de ese modo. Plegarias atendidas, a pesar de ser una obra incompleta y de decadencia, es divertidísima. Probablemente por el chismorreo.
Oh, by the way... "leave me alone Mrs. Vandervilt..."
I've got plenty of time of my own...
Hola, Nino. Gracias por pasar por aquí y comentar. Lo mismo digo. Un saludo.
Nemo. A mí me pasa lo mismo con Plegarias. La primera vez que la leí (pues supongo que con 15 ó 16) no sabía quiénes eran casi ninguno de los personajes que citaba (Porter, Beaton, Salinger, la señora Matthau, etc...) La volví a leer unos años después y vamos coincido. Divertidísima. Un saludo.
Amigo David,
nuevamente vuelves a hacer que cumpla el dicho ese de "nunca te acostarás sin saber una cosa más". Mi incultura en todos estos temas (como en muchos otros) hace que me sorprendan tus posts sobremanera.
¿Cartas ensayo-románticas?, ¿al estilo de las de Kafka a Milena?.
Lo cierto es que de Salinger sabía más bien poco y que su obra de El guardián se aprecia mejor en su idioma original que en el traducido, donde se pierden muchos matices.
Y yo prefiero a Capote de todas, todas.
Un abrazo
Maágnifica entrada, muy "vanity fair", todos los que salen son verdaderamente interesantes, y en cuanto a Capote un genio. Plegarias cada vez que lo releo, mejora. Buen blog,me pasaré por aquí
Interesante post, la verdad es que no he leído El Guardían..me da miedo jaja..es como Woody allen cuando escucha Wagner, que le da "ganas de invadir Polonia",;)
bueo lo acabaré leyendo digo yo...
saludos
Vaya. ¿Y por qué a mi la conversación, la primera, la que has extraído de "Plegarias Atendidas", de Truman Capote me recuerda tanto a un libro de Salinger? No sé cuál, pero me ha parecido muy familiar. Truman Capote también es un gran escritor, aunque parece que a Truman no le hacía mucha gracia Salinger ¿no? Que lo consideraba un gran escritor pero se mofaba porque no publicó mucho. Bueno, quizá es una impresión mía
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